PSE-EE GIPUZKOA

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Petri Romero ha pedido a la Consejería de Educación del Gobierno Vasco que trabaje porque las escuelas se conviertan espacios en que estos menores se sientan “seguros"

El grupo juntero “Socialistas Vascos-Euskal Sozialistak” ha pedido hoy al Gobierno Vasco que ponga en marcha la Ley de no discriminación por motivos de identidad de género y de reconocimiento de los derechos de las personas transexuales que promovió y aprobó el gobierno socialista del Lehendakari Patxi López.

La juntera socialista, Petri Romero, ha defendido hoy en el Pleno de las Juntas Generales de Gipuzkoa que el Ejecutivo de Urkullu debe desarrollar y cumplimentar la misma “sin demoras” y además ha reclamado a la Consejería de Educación del Gobierno Vasco que debe colaborar en evitar los casos de discriminación y proteger a estos menores transexuales.

“Es una responsabilidad conjunta de la comunidad educativa, los padres y los compañeros, evitar que el acoso escolar por razón de diversidad sexual y de género y por supuesto de cualquier otro motivo siga existiendo”, ha dicho. Es, -en su opinión-, una “obligación política de las instituciones y poderes públicos vascos el hacer posible este objetivo”.

 PSE-EE ha transaccionado junto a Podemos y EHBildu una Enmienda que ha sido respaldada por todos los grupos de la Cámara y aprobada por unanimidad por el Pleno de las Juntas Generales de Gipuzkoa.

Romero, con los datos aportados en el informe publicado por la Asociación Gehitu en Gipuzkoa, ha señalado que entorno al 8% de los alumnos varones y el 4% de las chicas, independientemente de su orientación sexual o su identidad de género ha sido víctima de alguna acción homofóbica. Un 6,5 de los escolares han recibido insultos por este motivo, un 3,7% ha sufrido exclusión y el 2,71% ha recibido palizas.

Además, ha explicado que “solo algo menos del 25% del alumnado que sufre bullying homofóbico se atreve a contarlo a algún adulto” y otros datos “duros” señalan que “el 43% de los menores encuestados llegó a tener pensamientos suicidas”.

Ante esta realidad ha explicado que las instituciones y concretamente el departamento de educación del Gobierno Vasco debería luchar por lograr que las escuelas “siempre” sean un espacio donde nuestros alumnos se sientan “seguros”. Sin embargo, para estos jóvenes “las escuelas se pueden convertir en la fuente de un tipo de violencia del que son víctimas y que ejercen sus propios compañeros”.

Por eso, ha instado al Gobierno Vasco del PNV a que vele porque el sistema educativo sea un espacio de respeto y tolerancia libre de toda agresión o discriminación, que haya una coordinación entre el sistema educativo, sanitario y social para la detección e intervención ante situaciones de riesgo de los menores que manifiesten una identidad de género distinta a la asignada al nacer.

También ha reclamado que se garantice la protección y no exclusión, así como la ausencia de toda forma de violencia para menores estudiantes, docentes, familias y personas en el ámbito escolar. Para ello, pide que se activen protocolos en materia de educación para formación continuada de profesorado en educación sexual, orientaciones sexuales, identidades de género, diversidad de modelos familiares para que mediante estas normas de actuación se detecte, intervenga y se combata cualquier forma de discriminación en defensa de estos menores.

Por otra parte, solicita que haya una supervisión continua mediante una evaluación de la situación de posible acoso en los centros educativos vascos aumentando los recursos y medios para hacerlo posible.

Por último ha insistido en que en una cuestión que afecta de una manera tan especial a los menores es necesario “trabajar, trabajar y trabajar” para lograr la igualdad y evitar casos de discriminación y acoso contra menores